Preocupación por falta de agua potable en establecimientos educativos: las entregas del Consejo Escolar no alcanzan
Cerca de 80 establecimientos educativos del partido de La Plata reciben una dotación de agua por problemas de potabilidad. La cifra es exigua para lo que necesita consumir un niño. El Consejo Escolar entrega una décima parte de lo necesario, según afirman fuentes sanitarias. Tampoco tiene los recursos económicos para probar la factibilidad del agua.
Cada uno de los 80 establecimientos educativos de la ciudad, sobre un total de 317, recibe agua por parte de Consejo Escolar. Son entregados un total de 15 bidones de 8 litros, es decir, cerca de 120 litros por semana.
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— El Editor Platense (@editor_platense) April 24, 2024
De acuerdo a lo mencionado por autoridades sanitarias, un niño o niño de 7 a 12 años, bebe un promedio de 8 vasos de agua por día, algo así como como dos litros de líquido diario. Es decir que, durante las cinco horas diarias que concurre el alumno/a al establecimiento educativo, sin contar días de Educación Física o escuelas de doble jornada, el saldo diario está en los dos vasos de agua, es decir, medio litro diario en horario escolar.
En este caso, si el consumo diario es de medio litro por día de clases, al finalizar la semana el niño/a habrá de consumir un total de 2,5 litros de agua. Si estos 2,5 litros se multiplican por los 500 menores que concurren a clases, sin contar maestras, personal de maestranza, ni directivos, la cuenta supera largamente lo aportado por el Consejo Escolar.
Sería necesario dotar a esas escuelas con un total de 1.250 litros de agua semanales, a razón de 8 litros por bidón, sería algo así como 156 contenedores. Diez veces más de los que provee la institución que conduce Iván Maidana.
Así, aunque se bajara el consumo de agua de un menor a tan solo un vaso de agua durante toda la mañana, es decir 250 centímetros cúbicos, la cuenta sería la mitad de lo anterior, pero igualmente muy por encima de lo aportado por el Concejo Escolar.
Versiones oficiales afirmaron que la problemática en escuelas rurales es muy diferente a los establecimientos educativos urbanos, donde el gran inconveniente radica en la limpieza de tanques y, en otros casos, la factibilidad que otorgan las empresas químicas exigido por las autoridades escolares.
Las direcciones escolares, por mandato del Ministerio de Educación, no aceptan dejar de recibir el pack de agua semanal hasta tanto el Consejo Escolar no certifique, bajo estudio de una química, que el agua es apta para el consumo. Estos estudios, según datos de fuentes confiables, rondan los 100 a 120 mil pesos por establecimiento.
Esa misma fuente confirmó que los trabajos de limpieza de tanques ya se hicieron en muchos de esos edificios, pero no se han podido otorgar los certificados por falta de recursos económicos, por lo que se continúa enviando agua a las escuelas.
Resulta de suma urgencia que la conducción del Consejo Escolar, en este caso, Iván Maidana, tome nota en solucionar este problema. Que les falte agua a los niños es gravísimo, porque impide que accedan a una educación en un ambiente sano, higiénico y saludable, sin limitaciones en el consumo de este elemento esencial.
