Elecciones en SOEME: lo echaron por robar los vales de nafta y ahora se erige como la reserva moral de los no docentes
De cara a las elecciones del Sindicato de Obreros y Empleados de Minoridad y Educación, las distintas facciones internas muestran a sus candidatos para ocupar la máxima representación gremial del sector que encolumna a los no docentes.
El espacio sindical Lealtad a los Trabajadores presentará, en un acto a desarrollarse en el Club Platense de La Plata, a Juan Fernández, a quien fuera personal del Ministerio de Salud, despedido por robar los vales destinados a dotar de combustible a los vehículos oficiales, para convertirse como la máxima autoridad del sindicato de SOEME.
A principios de este mes, la Secretaría de Trabajo nombró a la contadora Vanesa Benavidez para avanzar con el proceso electoral en el sindicato. La nueva delegada normalizadora de SOEME ya fijó los plazos para la convocatoria a elecciones de la organización sindical.
Por ese motivo, el sindicato que está intervenido desde 2018, ingresó en un período de organización y llamado a elecciones en los pasos previstos y designados por la interventora: Vanesa Benavidez.
Los trabajadores de Minoridad y No Docentes, para terminar con la corrupción e ir por conquistas laborales y salariales, procurando un sindicato limpio, eligieron para que los represente en una lista a un señor cuyo último trabajo responsable que se le conoce fue en el Ministerio de Educación provincial, y lo finiquitaron porque lo encontraron responsable de quedarse con los vales de nafta.
La organización que representa Fernández viene orquestando en las últimas semanas, escraches a trabajadoras y trabajadores del sector acusándolos de “traición” y “robo”, de manera muy irresponsable, sin reparar en los antecedentes de su propio candidato.
Al parecer, para finalizar, los obreros del gremio que nuclea a miles de trabajadores y trabajadoras, que precisan de una representación seria y eficaz que vele por su bienestar, solamente consiguen aglomerar garrapiñeros y caranchos que, por sus antecedentes, solamente podrían perseguir una sola ambición. Y no es precisamente la representación de sus pares.